Eso, precisamente, no está en armonía con la idea de un dios misericordioso y que permite que la persona sea quien decida si se salva o se condena.
Y aquí es donde entran precisamente las explicaciones de todo tipo para excusar las inconsistencias del persona de Dios presentadas en el Antiguo Testamento. Usted mismo deja claro que Dios es quien hace como quiera con el faraón, y básicamente utiliza a esa creación para "mostrar su poder", privándolo así de salvarse (que, si bien recuerdo, en algunos momentos el faraón mismo iba a dejar a los hebreos ir y, ¡pum!, le endurecen el corazón... Todo un títere).
Y, con todo el respeto John, noto en usted una cierta arrogancia en cuanto a el entendimiento de la Biblia en comparación con otros creyentes. Su primera respuesta, que he notado, es que los cristianos "estándar" no saben interpretar, o no pueden conciliar esto con aquello, etc, como si usted tuviera siempre la interpretación correcta. Pero usted precisamente termina construyendo el mismo tipo de excusas que he escuchado de otros creyentes; esa explicación suya no difiere en nada de muchas que he escuchado.