Creo, no entendió el punto. Al comienzo de la predicación, los apostoles se dirigieron a los gentiles, es decir a las personas que aún no creían, por eso en la Biblia se hace tanta referencia que es necesario creer en Cristo y ser bautizado. Por de allì en adelante, cuando las personas creían entraban en la Nueva Alianza con Cristo, y dada la fe de los creyentes adulto, los hijos de estos eran santos y como tal eran parte de esta Nueva Alianza, por lo tanto el bautismo era aplicado a los niños de los creyentes. En la Biblia hay referencias de que familias enteras eran bautizadas, de hecho cuando San Pablo se dirige al carcelero de filipo, habla de que tenga fe y será salva el y toda su familia.
Por eso es que he hecho la comparación de la circunción del Antiguo Pacto, con el Bautismo del Nuevo Pacto, pues en ambos se necesitaba fe, pues era señal de justificación. Así por la fe de los padres hebreos, los niños entraban al pacto que Dios había hecho con Abraham. Así también sucede con el bautismo, por la fe de los padres cristianos los niños de estos entran en el Nuevo Pacto aún cuando estos sean incapaces de creer, tal como sucedía con los niños hebreos. Así fue como lo entendió la Iglesia Primitiva y así es como queda registrando en los escritos de los primeros cristianos.
Por ejemplo San ireneo de Lyon martir y discipulo de San Policarpo de Esmirna, que fuera a su vez discipulo de San Juan, en su escrito contra los Herejes, enseña lo siguiente:
Porque vino a salvar a todos: y digo a todos, es decir a cuantos por él renacen para Dios, sean bebés, niños, adolescentes, jóvenes o adultos. Por eso quiso pasar por todas las edades: para hacerse bebé con los bebés a fin de santificar a los bebés; niño con los niños, a fin de santificar a los de su edad, dándoles ejemplo de piedad, y siendo para ellos modelo de justicia y obediencia; se hizo joven con los jóvenes, para dar a los jóvenes ejemplo y santificarlos para el Señor”
San Ireneo, Adversus haereses 2, 22,4 (2)
La Iglesia ha recibido de los Apóstoles la costumbre de administrar el bautismo incluso a los niños. Pues aquellos a quienes fueron confiados los secretos de los misterios divinos sabían muy bien que todos llevan la mancha del pecado original, que debe ser lavado por el agua y el espíritu.”
Orìgenes In Rom. Com. 5,9: EH 249 (3)
“Si los niños son bautizados “para la remisión de pecados” cabe preguntarse ¿de qué pecados se trata? ¿Cuándo pudieron pecar ellos? ¿Cómo se puede aceptar semejante testimonio para el bautismo de niños si no se admite que “nadie está exento de pecado, aún cuando su vida en la tierra no haya durado más que un solo día”?. Las manchas del nacimiento son borradas por el misterio del bautismo. Se bautiza a los niños porque “si no se nace del agua y del espíritu, es imposible entrar al reino de los cielos” .
Orígenes, In Luc. hom. 14, 1.5 (4)
“Al cantar el gallo, se comenzará a rezar sobre el agua. Ya sea el agua que fluye en la fuente o que fluye de lo alto. Se hará así salvo que exista una necesidad. Pero si hay una necesidad permanente y urgente, se utilizará el agua que se encuentre. Se desvestirán, y se bautizarán los niños en primer término. Todos los que puedan hablar por sí mismos, hablarán. En cuanto a los que no puedan, sus padres hablarán por ellos, o alguno de su familia. Se bautizará enseguida a los hombres y finalmente a las mujeres…
El obispo al imponerle las manos dirá la invocación: “Señor Dios, que los has hecho dignos de obtener la remisión de los pecados por medio del baño de la regeneración, hazlos dignos de recibir el Espíritu Santo y envía sobre ellos tu gracia, para que te sirvan siguiendo tu voluntad; a ti la gloria, Padre, Hijo y Espíritu Santo, en la Santa Iglesia, ahora y por los siglos, Amen”
San Hipólito , Tradición apostólica 20,21 (7)
Y así podría seguir con los testimonios de la iglesia del siglo II, III, IV, V etc. La iglesia cristiana nunca negó el bautismo de los niños, porque entendía que era una enseñanza dada por los mismos apostoles.