La respuesta es simple: El hecho de que no haya nada después de la muerte, o que el tiempo que nos toca vivir sea insignificante en comparación a lo que viven otras especies, el tiempo que tiene y le queda de existir a la tierra, etc, no hace que mis sentimientos o pensamientos sean menos válidos.
Por qué ayudar al prójimo, por qué pasarlo bien, irse de fiesta de vez en cuando, tener sexo, robarle un beso a alguna guapísima muchacha, estudiar, etc? Porqué me gusta, porque encuentro que lo más importante después de darse cuenta del poco tiempo útil que tenemos es tratar de sacarle el jugo al máximo.
Cuando veo a un niño vendiendo en la calle no puedo evitar sentir tristeza, rabia, repulsión, cuando doy un beso o hago el amor no puedo evitar sentir la alegría, la excitación, el latir de mi corazón, cuando estoy solo pasa igual con la nostalgia y de vez en cuando un poco de tristeza, etc, etc, etc. Por qué renunciar a todo esto? Hace falta que haya vida después de la muerte para vivir cada emoción al máximo? Para aprender, para tratar de crecer personalmente? No, incluso si uno cree que existe vida después de la muerte tiende a aplazar las cosas y simplemente esperar a que todo mejore por sí solo, en lugar de tratar de salir adelante solo (lo sé porque alguna vez yo fui creyente).[/quote]
Sabes es la primera respuesta que das que la vea positiva con un punto de vista muy bueno, es que lo importante es luchar por la vida actual, disfrutarla y tratar de ser mejor cada día no por lo que se pueda enconjtrar en otro lugar sino por que el hacer cosas buenas te ayuda a crecer como persona y a ser cada día mejor.
Insisto es una muy buena respuesta