Dejando de lado los cínicos, que confunden cinismo con sofisticación o inteligencia, y los que no ven más allá de los diez años anteriores a hoy, hay varios candidatos al puesto. Y al contrario de Arias o Pacheco, están bastante alejados en la historia para poder hacer un juicio más objetivo y desapasionado:
- José Rafael de Gallegos (1833-35) Nuestro segundo Jefe de Estado no sólo tuvo que seguir a nuestro Ilustre primer Jefe de Estado, el gran Juan Mora Fernández. Fue el electo por el Congreos cuando los demás candidatos no obtuvieron mayoría. Además, debió enfrentarse aun país fuertemente segmentado por localismos. Durante su gobierno se decretó la nefasta y absurda Ley de la Ambulancia, que decretaba el traslado de la ciudad capital cada año entre Alajuela, San José, Cartago y Heredia. Hastiado de la oposición a su mando, renunció a los dos años.
- Vicente Herrera Zeledón (1876-77) Uno de los presidentes títeres que puso Tomás Guardia durante su largo mandato (1870-82). Autoritario y despótico, Vicente Herrera cerró periódicos y restringió libertades públicas. Perdió pronto el favor de Guardia, y se le permitió renunciar. o hay mucho más de mérito en su gobierno.
- Federico Tinoco Granados (1917-19) Derrocó a un presidente visionario, pero con poco apoyo político. Hay que recordar que el público recibió con gran alegría y alborozo su ascenso al poder. Alegría que pronto se esfumó, ante su creciente autoritarismo, y los problemas económicos genraos por el no reconocimiento de su gobieno por parte de los EEUU. Luego de una revuelta en su contra, de gran violencia (el crimen de Rogelio Fernandez Guell es de recordar) y el asesinato de su apuesto hermano Joaquín en San José (por asuntos de paíson dicen algnos), Federico Tinoco debió abdicar el poder y abandonar el país, al que nunca regresó. Falleció en 1933 en París, sin dinero. Es el único presidente cuyo retrato no está (o no debería estar) en el salón de Ex-Presidentes de la Asamblea Legislativa.
- Rodrigo Carazo Odio (1978-82) Probablemente una de las personas más inteligentes y preparadas para ser Presidente en la Historia del país. Su hoja de servicio público antes de asumir la presidencia es notable: fue miembro del PLN y constructor con éste del estado de bienestar socialdemócrata desde 1948. Su gobierno estuvo marcado por una seria crisis internacional. Crisis que, en el país, tuvo efectos mucho más serios, en gran medida por la incapacidad y falta de voluntad de enfrentar los hechos. La estrategia de Carazo fue básicamente mantenr la situación, en la esperanza de que el problema no explotra en su mandato. El supuesto defensor de la soberanía nacional ante la prepotencia del FMI, hipotecó el futuro del país por generaciones, al cuadruplicar la Deuda Externa en su mandato y declarar la moratoria en los pagos de la misma, cuando la situación se volvió insostenible. Esa es en el fondo la gran falta y la tragedia del gobieno de Carazo.
Un excelente resumen que ha hecho Jorge F, tomando en cuenta la historia patria completa. En cuanto a Carazo, que a mí me tocó vivir como profesional y como empresario, quizás vale agregar un par de cosas:
1. Contrario a lo que dicen los izquierdistas en las aulas universitarias (y hay quienes les llegan a creer) Rodrigo Carazo comprometió al país en la aventura sandinista de Nicaragua. Abrió sin límites las puertas de la irresponsabilidad para que entrara el armamento que venía desde Cuba. Por fortuna Somoza no se atrevió a lanzar una ofensiva contra nuestro país que nos hubiera costado no poca sangre y llanto. En ese esfuerzo absurdo, nuestro país gastó importantes recursos en ser la retaguardia sandinista, brindando servicios hospitalarios, alimenticios y logísticos a una izquierda que aún ahora nos ocasionan problemas. Nadie quería a Somoza, pero al menos no se metía con nosotros.
2. Al ser electo de un "rejunte" de grupos y grupúsculos políticos en que compartían por igual derechistas e izquierdistas, Carazo debió formar un gobierno igualmente disparejo, con un izquierdista como ministro de Seguridad y una extremista de derecha como ministra de Trabajo. De igual modo, el Ministro de Planificación era un hombre de izquierda moderada y el flamante ministro de Hacienda era de los llamados ahora neoliberales, de los famosos y conocidos "Chicago´s boys", que también dirigieron la política económica del Chile de Pinochet. Este nuevo ministro se dedicó a experimentar en la vida real lo que en teoría había aprendido en sus lecciones liberales. Así, jugó con el tipo de cambio y desató el apocalipsis en la economía. Todo ello en un momento de crisis mundial que al parecer es de lo único que gustan de recordar nuestros universitarios de izquierda reciclada. La crisis existió, es cierto, pero las ocurrencias experimentales del ministro de Hacienda profundizaron más aún los efectos y como dice JorgeF, no hicieron nada positivo para calmar dicha crisis si no que por el contrario la aceleraron más y más.
Sin duda, todo ello para señalarlo como el peor gobierno de la segunda mitad del Siglo XX, en la primera sin duda se lleva la premiación nuestro amigo Tinoco.