Sí, hablo muy en serio. Vamos a ver, aquí hay varias cosas por señalar:
1. Esa noticia es periodística. No es mi intención desacreditar a nadie, la fuente ni mucho menos, pero entiéndase eso, que la noticia es periodística. Se están ignorando otras fuentes más directas junto con otros datos, como la del Ministerio de Justicia y Paz en donde hay informes y datos estadísticos en donde a la vista se ve que esta información expuesta en la noticia es muy, muy, pero muy parcial.
2. Hay un problema serio. Realmente serio: el hacinamiento en las cárceles. No es que hay 100 presos más. No son 1000 tampoco. Estamos hablando que el hacinamiento es tal que nos estamos buscando una bronca bien chiva en relación a los Derechos Humanos. Las condiciones de esta gente realmente son infrahumanas literalmente. Por más que la gente le entre una especie de "moralismo" respecto al tema cuando dicen que los criminales no merecen condiciones dignas porque son criminales, se lo merecen; el país no puede violentar los Derechos Humanos, aunque sean delincuentes y las instituciones están obligadas a cumplir con ello. Nos guste o no. Costa Rica debe solucionar ese problemón de hacinamiento como para antier porque el asunto se está poniendo cada vez más de color de hormiga, aunque ya lo está.
3. Ante este panorama caótico (porque no tiene otro nombre y tampoco hay que usar eufemismos) hay que pensar en iniciativas. No hay pena de muerte, no los podemos matar y ya. No hay más infraestructura (por ahora) y la que se tiene actualmente no está ni cerca de ser la más idónea, está mega deteriorada. El personal administrativo la está viendo fea porque no están dando a basto. Los recursos estatales no son suficientes para variar. En este sentido, deben buscarse soluciones, a corto, mediano y largo plazo.
4. No es la primera vez que se aplica una iniciativa así. Y creo que en alguna medida hay un esfuerzo para hacerlo bien. Ese extracto de entrevista que usted colocó en donde el Colegio de Criminólogos mantiene sus dudas respecto a esta iniciativa es porque, claro, hasta en esta parte el sistema está saturado. Pero lo cierto es que si esto no se realiza, el panorama sería y será mucho peor.
En la página del Ministerio de Justicia y Paz se refieren específicamente a este problema:
"
Al cierre del 2014, la Dirección General de Adaptación Social tramitó 2.604 desinstitucionalizaciones, ejercicio que consiste en revisar el perfil del privado de libertad. Quienes reúnen los requisitos de ley y no impliquen un riesgo para la comunidad, pueden ser trasladados de la cárcel al sistema semiinstitucional o semiabierto, donde duermen fuera algunos días, pero sujetos a un modelo de atención que emplea Adaptación Social durante todo el proceso de reinserción. Fue un logro bastante superior al de años anteriores. No obstante, esta acción diligente del Ministerio de Justicia contrasta con la cantidad de privados de libertad en carácter de indiciados (en prisión preventiva), que hoy asciende a 2.789, quienes están en la cárcel a las órdenes de las autoridades judiciales".
Aquí es en donde quisiera llegar: quienes cuenten con este privilegio no es cualquier privado de libertad. Evidentemente esto no aplica para quienes, por ejemplo, se encuentran en las famosas "catacumbas" de la Reforma. Ahora bien: al parecer, aún con esta iniciativa, la cantidad de indiciados sigue llegando y por montones. De acá no se sabe quiénes se quedan cumpliendo condena, ni qué tipo de condena se le dará.
Sé que usted coincidirá conmigo en algo: esta no es la mejor solución y tampoco es suficiente. Pero insisto, ante este serio problema hay que tener iniciativas de corto, mediano y largo plazo. No están dejando libres a privados condenados por homicidio ni violación, son gentecilla que le gusta estafar, los de cuello blanco; además se les hará un revisión de expediente, son privados con cierta edad, quienes han cumplido con parte de la pena y además se les va a vigilar. Si colocamos eso en balanza, pues bueno, podríamos parafrasear a Luis Fishman: es lo menos malo. Yo prefiero eso a que liberen a un violador de menores o un asesino en serie. El asunto es tan serio que ni modo, las decisiones deben ser de esta naturaleza.
Desde esta perspectiva y dado el estado actual de las cosas, creo que como solución inmediata me parece que merece el beneficio de la duda. Como solución inmediata al problema, aclaro. Esto mientras las lentas instituciones de Tiquicia se organizan, crean una política criminal seria (la cual dudo que exista y funcione actualmente), mientras hacen más cárceles y mientras cumplen con las iniciativas a mediano y largo plazo.
Ves care' pez...