Curiosamente me leei un rato la mierda de Crepúsculo a ver que era lo que lo hacia tan famoso a este bendito libro que algunas mujeres se mojaban sus bragas.
Y una risa curiosa salio en mi al final de leer esta historia.
Más allá de lo anecdótico (todos sabemos que como literatura esta serie es una mierda), lo más ponzoñoso de los libros es que erigen un ideal de romanticismo increíblemente degradante, especialmente para las mujeres.
La autora de la saga es mormona, y esta religión, además del detalle morboso de no admitir el sexo antes del matrimonio (cosa que también sale reflejada de una forma u otra en las novelas), relega a la mujer a un papel de esposa y madre, de criar hijos y servir al marido. Y así la protagonista de esta saga es una mujer débil, dependiente, unidimensional -sólo vive para el novio- y sin ningún tipo de autonomía, está objetivizada, es un mero objeto por el que los hombres de la historia pelean. Siguiendo con esto, el vampiro tiene las características complementarias de una relación de este tipo, es celoso, controlador, fuerte... y, claro, perfecto para ella.
Lo gracioso es que bajo estas premisas se podría escribir una historia ácida sobre este tipo de relación enferma, pero la autora no aspira a tanto, al parecer ella cree genuinamente que está escribiendo sobre el amor y el romanticismo. Resulta un poco paradójico que esto triunfe especialmente entre mujeres, adolescentes y ya creciditas.
Bueno... y la pelicula es infumable.