Sé que su número de la suerte es el 67 en honor al natalicio de Enrique Ortiz. También sé de la compañera que le gusta remojar su carne en la copa de vino, antes de masticarla; y que su estrella favorita es Betelgeuse porque es la novena estrella más brillante del firmamento y el número 9 es su segundo favorito en la lista porque a los 9 años de edad ganó su primera —y única— medalla en las olimpiadas estudiantiles de su cantón. Le gustan los loros y los gatos pero por el obvio conflicto, prefirió tener solo loros —tiene 6—. Tiene un tatuaje con una leyenda en japonés en el hombro. El japonés es su idioma favorito, después del español que practica con pasión cuando habla y escribe.