La respuesta corta es que no, menos si hablamos de San Joaquin y etc, porque son negocios que pagan impuestos (aunque muchos muy expertos en la elusión) y que además, no es cuestión de que les quiten la patente, es mucho más difícil que no la renueven a que no la entreguen, puesto que con esto estarían teniendo una afectación no solo al propietario, si no a los empleados y etc.
Claro, cada caso es casuístico (valga la redundancia), pero sin pruebas de anomalías y sin las denuncias pertinentes poniendo la cara (y arriesgándose a represalias), probablemente no pase nada y sigan con su negocio tranquilamente.