El tiempo es maleable, no es constante y rígido como nos han dicho, lo descubrí exactamente hace 3 años cuando te vi por primera vez. Todo se detuvo, esos segundos parecieron horas, no había nadie más que nosotros dos, el tiempo inclemente me concedió un alto para contemplarte, para hablarte, besarte y sostenerte entre mis brazos por primera vez.
Ahora ya no sos mi bebé, sos mi niña, te haces grande, más rapido de lo que yo quisiera. El tiempo se está cobrando poco a poco el regalo que me dio hace 3 años.
Me haces feliz cada día, me enseñas a ser mejor, a amar mejor, a abrazar mejor. Me enseñas sobre la paciencia, sobre la ternura, sobre la fuerza y la inocencia.
Gracias por hacerme la mejor versión de mí mismo. Gracias mi niña por ser, por reír, por ser feliz, por gritar, correr, jugar, desvelarme.
Te amo mi nena. Feliz cumpleaños!