Yo soy un mae que no meto mi llave en cualquier llavín...
Generalmente (con una o dos excepciones) lo que hago es que cito a la "escort" (solamente he ido a una "casa de citas" una vez) a mi hotel, pero al lobby, y la invito a tomarse algo o a una comida y a conversar. Si yo veo que la chava es interesante, se siente a gusto y logré/logramos romper el hielo, vámonos.
Pero si después de 30 minutos la maje está todavía incómoda, mirando el reloj, y pendiente se su puto celular, le doy algo para el taxi y la mando de regreso.
Yo solo le meto la verga a una mujer con la que yo sienta que puedo establecer una relación de amistad, aunque no lo haga. Que si la llamo y le digo: "Buenos días, Fulana. Te habla Jorge XXXXXX y estoy de regreso en San José" que la maje sepa por lo menos quien soy, o que no tenga mucho esfuerzo en ubicarme por el nombre y la voz.
Ese es el tipo de relación "sentimental" que yo busco, y que creo muchas de estas chavas buscan.
Si lo que quieres es una relación exclusiva, o una amistad simplemente para recibir de vez en cuando un descuento o ciertas extras sin tener que pagar, o para que te hagan "el favor" de vez en cuando, estás en el lugar equivocado. La realidad es que muchas de estas mujeres son sexoservidoras por negocio, no por amor al arte. Si andas buscando una mujer que te quiera por tu "linda personalidad" en este medio, tienes que ir a visitar a un profesional en psicología. La "pearmibilidad" que uno tiene en las relaciones interpersonales es inversamente proporcional a la auto-estima. Las sexoservidoras cumplen una función específica: te dan lo que quieres a cambio de dinero. Punto. Es una transacción puramente comercial. Y mientras eso esté claro entre las partes, la amistad tiene posibilidades de surgir con el paso del
tiempo.