Sus labios no tienen por qué ser simétricos. Cada lado del cuerpo no es exactamente igual que el otro, y tampoco lo son los labios vaginales. Esta asimetría es normal y no afecta ni a la salud ni al placer sexual.
La lubricación varía de una mujer a otra. Y de un día a otro. Como el flujo, responde a cambios hormonales y también a estimulaciones sexuales y psicológicas.
A veces produce ruidos molestos durante el coito. Son más habituales de lo que crees y totalmente naturales. Cuando el pene penetra en profundidad, puede quedar algo de aire atrapado en la vagina y después, al retirarse, salir al exterior produciendo ruido.
La vagina tiene su propio aroma. Si está sana emite distintos olores, dependiendo de tu propia química corporal, de si has sudado y del momento de tu ciclo menstrual. También ciertos alimentos y medicamentos pueden influir en su olor. En cualquier caso, debes evitar los perfumes, desodorantes o toallitas íntimas con fragancias fuertes, ya que pueden irritar la zona o provocar reacciones alérgicas.
¿Y si algo se introduce en su interior? ¿Qué pasa si el tampón se queda muy dentro o si el preservativo se escurre al interior y no podemos alcanzarlo? Tranquila, la vagina es una especie de callejón sin salida para todo lo que no sean fluidos. Puede pasar que, a veces, el tampón o el preservativo se introduzcan demasiado y no puedas alcanzarlo con los dedos. Inténtalo poniéndote en cuclillas y, sin no lo logras, acude al médico. El objeto no va a pasar al útero ni a otro órgano interno, pero puede causarte una infección vaginal si no lo extraes.
La lubricación varía de una mujer a otra. Y de un día a otro. Como el flujo, responde a cambios hormonales y también a estimulaciones sexuales y psicológicas.
A veces produce ruidos molestos durante el coito. Son más habituales de lo que crees y totalmente naturales. Cuando el pene penetra en profundidad, puede quedar algo de aire atrapado en la vagina y después, al retirarse, salir al exterior produciendo ruido.
La vagina tiene su propio aroma. Si está sana emite distintos olores, dependiendo de tu propia química corporal, de si has sudado y del momento de tu ciclo menstrual. También ciertos alimentos y medicamentos pueden influir en su olor. En cualquier caso, debes evitar los perfumes, desodorantes o toallitas íntimas con fragancias fuertes, ya que pueden irritar la zona o provocar reacciones alérgicas.
¿Y si algo se introduce en su interior? ¿Qué pasa si el tampón se queda muy dentro o si el preservativo se escurre al interior y no podemos alcanzarlo? Tranquila, la vagina es una especie de callejón sin salida para todo lo que no sean fluidos. Puede pasar que, a veces, el tampón o el preservativo se introduzcan demasiado y no puedas alcanzarlo con los dedos. Inténtalo poniéndote en cuclillas y, sin no lo logras, acude al médico. El objeto no va a pasar al útero ni a otro órgano interno, pero puede causarte una infección vaginal si no lo extraes.