Estos comportamientos son muy lamentables, y primero ahora nadie aparece de los que botaron la basura.
Segundo, siempre saldrá alguien diciendo que no había basureros.
Tercero, como ya mencionaron arriba, que los borrachos no se preocupan por su basura, pero por qué se emborrachan en la vía pública.
Es un asunto cultural que nos tomará mucho tiempo en cambiar, por ahi decían que una ciudad limpia no es la que más limpian sino la que menos se ensucia. Se pueden hacer estas celebraciones, pero manteniendo el orden, no emborrachándose en la vía pública y recogiendo cada uno su basura.
Sería muy agradable y gran ejemplo que después de cada celebración, el lugar quedara igual que como lo encontraron... pero todavía nos falta mucho para llegar a ese cambio.