En muchas denominaciones cristianas, les enseñan, erroneamente, a sus feligreses, que el fenomeno de hablar en lenguas que se dió en la epoca del pentecostes y que se encuentra ilustrado en el el Libro de Hechos, se mantiene actualmente, a continuacion les dejo un ustudio biblico con respecto a este tema escrito por el Señor Lorenzo Luevano Salas.
¿Qué dice la Biblia acerca de esto? Debemos recordar que la Biblia es nuestra máxima
Autoridad en asuntos espirituales. Debemos tener presente que ella, y no la experiencia de los individuos, tiene la verdad; lo demás, es engañoso. Para entender lo que la Biblia dice acerca de esto, es necesario analizar lo que Ella nos dice acerca del "don de hablar en lenguas".
EL DON DE LENGUAS CESÓ: EVIDENCIA BIBLICA ESCRITA.
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Sin duda alguna, uno de los propósitos del "don de hablar en otras lenguas", era para anunciar el evangelio a otros que no hablaban el idioma de los apóstoles, a quienes se les dio la encomienda de predicarlo a "toda criatura" (Marcos 16:15). Una vez que recibieron el "don", los apóstoles lo utilizaron para predicar a "todas las naciones bajo el cielo" (Hechos 2:5b). Ellos predicaron en su "propia lengua en la que" habían "nacido" (Hechos 2:8, 11). Como vemos, el propósito que se menciona, está claramente dicho en estos textos bíblicos. Hoy en día, el "don de hablar en otras lenguas" ya no tiene propósito. ¿Por qué? Porque la Palabra de Dios, que era lo que los apóstoles predicaron, y que contiene el evangelio (1 Cor. 15:1-4), ha sido traducida a infinidad de idiomas.
Es claro, entonces, que por los diferentes lenguajes, Dios dio a los primeros predicadores el "don de hablar en lenguas". Sin embargo, hoy en día, tal impedimento ha sido superado, sin mencionar que los predicadores cristianos también están superando las barreras del lenguaje. No hay necesidad del "don" hoy en día. Otro de los propósitos del "don de hablar en lenguas", es que era una señal para ayudar y confirmar la predicación apostólica. "estas señales seguirán a los que creen: hablaran nuevas lenguas... y ellos, saliendo, predicaron en todas partes, ayudándoles el Señor y confirmando la palabra con las señales que la seguían" (Marcos 16:17, 20) Es claro, que el propósito de las "lenguas", así como el de otras señales mencionadas en el texto, eran para "confirmar la palabra" de los apóstoles; es decir, que aún cuando los apóstoles eran gente del vulgo, por medio de las señales, predicaban el evangelio con autoridad y firmeza, con seguridad y con el apoyo de Dios. Era válida su predicación, porque estaba siendo "confirmada" por Dios mismo. Por medio de las Señales, Dios otorgaba autoridad a los apóstoles para efectuar con éxito la misión que Él les había encomendado.
Debemos entender que tal confirmación ya no se puede dar en nuestros días. ¿Por qué? Porque la Palabra ya ha sido confirmada, y no es necesario que vuelva a ser confirmada. Esto lo dice muy claro Hebreos 2:3, 4: "la cual (hablando de la Palabra), habiendo sido anunciada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que oyeron, testificando Dios juntamente con ellos, con señales y prodigios y diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad" En este versículo póngase atención la frase "fue confirmada". En el griego encontramos la palabra “ebebaióte”. Este es un término jurídico, usado frecuentemente en el sentido de una garantía legal. El tiempo verbal usado aquí presenta la acción en su totalidad como algo ocurrido en el pasado. Entonces, las señales que fueron efectuadas, incluyendo el "hablar en lenguas", fueron usadas en el pasado para confirmar la Palabra. Y si ya fue confirmada o ratificada, no hay necesidad de ratificarla otra vez (Gálatas 3:15). "Un pacto, aunque sea de hombre, una vez ratificado, nadie lo invalida, ni le añade". La ratificación de un pacto es un acto final que es ratificado una sola vez y con esto basta para siempre. Buscar el "don de hablar en otras lenguas", sería como decir que la palabra de los apóstoles, la que está escrita en el Nuevo Pacto, no está completa y requiere de nuevos esfuerzos para ser ratificada. ¡Pero esto sería absurdo! ya fue confirmada, dice el Espíritu Santo, y si ya fue confirmada, ¡no hay necesidad de "las señales que la seguían" para su confirmación!. Entonces, el "don de hablar en lenguas" ha cesado, ya que su propósito ha sido cumplido.
EL DON DE LENGUAS CESÓ: EVIDENCIA BÍBLICA INTERPRETATIVA.
En la primera epístola a los Corintios, en el capítulo 13, versos 8-10, leemos nuevamente que los "dones milagrosos", entre los que se encuentra el de "hablar en lenguas", han terminado. El texto dice: "el amor nunca deja de ser; pero las profecías se acabarán, y cesarán las lenguas, y la ciencia acabará. Porque en parte conocemos y en parte profetizamos; mas cuando venga lo perfecto, entonces lo que es en parte se acabará” El verbo griego "katargeo" se usa en este pasaje, y significa "hacer ineficaz". Toda ocurrencia de este verbo en los versos 8 y 10 tiene la voz pasiva, indicando que alguna persona (Dios) haría ineficaces (inactivas) las profecías y la ciencia. Por otro lado, el verbo que es empleado en relación con las lenguas es, "pauomai", y este se encuentra en la voz media, indicando que desaparecerían espontáneamente. Como podemos ver, la ciencia, la profecía y las lenguas tendrían su fin a la llegada de "lo perfecto". Pero ¿qué es "lo perfecto? Analicemos primero una teoría a la luz de la Biblia:
Esta afirmación no es lógica. No puede referirse a la segunda venida porque el pasaje dice: "cuando venga" y no "cuando regrese". Tampoco puede referirse a Cristo porque la frase esta en género neutro. Dice: "cuando venga lo perfecto". Si se refiriera a Cristo, el texto diría: "cuando venga el perfecto", o simplemente, "cuando regrese Cristo", pero el texto no dice de ninguna de estas maneras. Entonces el texto no habla de la segunda venida de Cristo.
¿Qué es lo perfecto? Esta perfección es la perfección de la madurez, ya que Pablo, en el contexto, habla de ser niño y de llegar a ser hombre; es decir, de la infancia a la madurez. ¿Qué produce en nosotros madurez? La verdad, la Palabra de Dios; es decir, el Nuevo Testamento (Efesios 4:15). "Cuando venga lo perfecto", se refiere al conocimiento perfecto, completo y totalmente desarrollado (1 Cor. 13:12); al conocimiento de la voluntad de Dios. Hoy, y desde el año 100 aproximadamente, se encuentra en el Nuevo Testamento toda la voluntad divina (2 Pedro 1:3; Judas 3; 2 Timoteo 3:16, 17). A esta revelación no podemos quitarle ni añadirle sin caer en un pecado (Gálatas 1:6-10; 2 Juan 7-11; Apocalipsis 22:18, 19). Por designio de Dios tenemos en el Nuevo Testamento "toda la verdad" plenamente revelada a los apóstoles (Juan 16:13) Por tanto, no hay para la existencia de las lenguas y otras señales milagrosas en nuestros días. Eran para obtener "toda la verdad" ya que el Nuevo Testamento no existía en forma escrita. Así que la verdad estaba siendo revelada oralmente por medio de los dones; pero ahora tenemos toda la verdad divinamente inspirada y confirmada mediante las señales que la seguían (Marcos16:17-20; Hebreos 2:3, 4). Si está al alcance "toda la verdad" en el Nuevo Testamento, no sería lógico acudir a Dios y pedirle lo que ahora ya tengo. A base de una decisión hecha por Dios, los dones milagrosos cesaron al cumplirse su propósito primordial de revelar toda la verdad (Juan 16:13). Efesios 4:7-13 y 1 Corintios 13:8-13 juntos, con ciertas deducciones lógicas, fijan la duración de la época de los dones milagrosos, incluyendo el "hablar en lenguas". Efesios 4:13 enseña que los dones fueron "hasta que" (Preposición que expresa el término o fin de una cosa), todos llegaran "a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto". Esto muestra que las enseñanzas del Nuevo Testamento no fueron reveladas todas en un día sino paulatinamente a través de 60 añoso más, desde el 33 después de Cristo, cuando en Pentecostés fue predicado el primer sermón; hasta el 96 después de Cristo, cuando fue terminado de escribir el Apocalipsis. Poco a poco toda la Iglesia llegó a tener “toda la verdad". A fines del primer siglo, todos los creyentes ya tenían la doctrina completa y perfecta del Señor. Teniendo “toda la verdad", llegaron "a la unidad de la fe", y "del conocimiento" de Cristo, "el Hijo de Dios". Los dones duraron “hasta" aquel entonces; es decir, "hasta" los fines del primer siglo, luego, fueron hechos ineficaces o inactivos. Entonces "la fe", o sea, la doctrina completa "había sido una vez dada a los santos" (Judas 3).
El Espíritu Santo no volverá a efectuar de nuevo una obra ya hecha a perfección, completa, no volverá a revelar, mediante los dones, “toda la verdad"; no obrará más por medio de los dones al haber cumplido total y cabalmente la encomienda de Cristo (Juan 16:13). El Espíritu Santo les entregó a los apóstoles "toda la verdad", y lo hizo antes que pasara esa generación. Él ya no obra con dones, sino a través de la Palabra inspirada por él, la cual es "viva y eficaz" (Hebreos 4:12). "lo perfecto", se refiere, no a una persona, sino al conocimiento obtenido mediante los dones de "ciencia y profecía". Al decir, "ciencia", no se trata de ciencias mundanas como la geometría, la biología o la de mandar hombres a la luna, sino que se refiere a la voluntad divina obtenida en aquel tiempo por el don sobrenatural de ciencia (1 Cor. 12:8). En aquellos tiempos, los cristianos, conocían "..en parte..", porque cuando Pablo, por ejemplo, escribió a la Iglesia en Corinto no "..toda la verdad.." se había revelado, todavía el Espíritu Santo trabajaba por medio de los dones para revelar esa verdad totalmente. "..en parte.." profetizaban, poco a poco recibían el conocimiento de la verdad (Ef. 4:13), y también las profecías. Una vez que vino "..lo perfecto.."; es decir, el conocimiento total de la voluntad divina, o sea, el Nuevo Testamento, podemos obtener el "..conocimiento.." que necesitamos para madurar espiritualmente, y así, permanecer firmes en la vida cristiana durante esta vida. "..lo perfecto..", todo el Nuevo Testamento, el Nuevo Pacto hace posible llegar a "..un varón perfecto.."; es decir, a una iglesia madura, completa y totalmente organizada con "..toda la verdad.." (Ef. 4:13, 16). En su niñez (1 Cor.13:11), la iglesia recibió la verdad mediante los dones; al madurar (1 Cor. 13:11), era de esperarse que dejara los dones que la sostenían espiritualmente en su niñez, tal como un padre sostiene a su hijo cuando está aprendiendo a caminar, pero no lo sigue sosteniendo cuando éste ya sabe caminar. Así Dios ya sostuvo a la iglesia con los dones; por medio de ellos la enseñó y la preparó, proveyéndola con "..toda la verdad..", y la ha puesto en marcha mandándole que sea "..columna y valuarte de la verdad.." (1 Tim.3:15). Venido "..lo perfecto..", el Nuevo Testamento totalmente escrito, los dones cesaron. De manera que procurar ahora lo que Dios ha quitado es buscar vanamente lo que no está disponible para nuestros tiempos. "..Lo perfecto.." ha llegado, es decir, el Nuevo Testamento."..Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra éste será bienaventurado en lo que hace.." (Santiago 1:25) Como hemos notado anteriormente, los dones milagrosos, entre los cuales está el "don de hablar en otras lenguas", han cesado; por tanto, la practica Pentecostés y Carismática es fraudulenta por no estar respaldada por la Palabra de Dios.
EL FALSO DON DE HABLAR EN LENGUAS
¿Qué dice la Biblia acerca de esto? Debemos recordar que la Biblia es nuestra máxima
Autoridad en asuntos espirituales. Debemos tener presente que ella, y no la experiencia de los individuos, tiene la verdad; lo demás, es engañoso. Para entender lo que la Biblia dice acerca de esto, es necesario analizar lo que Ella nos dice acerca del "don de hablar en lenguas".
EL DON DE LENGUAS CESÓ: EVIDENCIA BIBLICA ESCRITA.
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Sin duda alguna, uno de los propósitos del "don de hablar en otras lenguas", era para anunciar el evangelio a otros que no hablaban el idioma de los apóstoles, a quienes se les dio la encomienda de predicarlo a "toda criatura" (Marcos 16:15). Una vez que recibieron el "don", los apóstoles lo utilizaron para predicar a "todas las naciones bajo el cielo" (Hechos 2:5b). Ellos predicaron en su "propia lengua en la que" habían "nacido" (Hechos 2:8, 11). Como vemos, el propósito que se menciona, está claramente dicho en estos textos bíblicos. Hoy en día, el "don de hablar en otras lenguas" ya no tiene propósito. ¿Por qué? Porque la Palabra de Dios, que era lo que los apóstoles predicaron, y que contiene el evangelio (1 Cor. 15:1-4), ha sido traducida a infinidad de idiomas.
Es claro, entonces, que por los diferentes lenguajes, Dios dio a los primeros predicadores el "don de hablar en lenguas". Sin embargo, hoy en día, tal impedimento ha sido superado, sin mencionar que los predicadores cristianos también están superando las barreras del lenguaje. No hay necesidad del "don" hoy en día. Otro de los propósitos del "don de hablar en lenguas", es que era una señal para ayudar y confirmar la predicación apostólica. "estas señales seguirán a los que creen: hablaran nuevas lenguas... y ellos, saliendo, predicaron en todas partes, ayudándoles el Señor y confirmando la palabra con las señales que la seguían" (Marcos 16:17, 20) Es claro, que el propósito de las "lenguas", así como el de otras señales mencionadas en el texto, eran para "confirmar la palabra" de los apóstoles; es decir, que aún cuando los apóstoles eran gente del vulgo, por medio de las señales, predicaban el evangelio con autoridad y firmeza, con seguridad y con el apoyo de Dios. Era válida su predicación, porque estaba siendo "confirmada" por Dios mismo. Por medio de las Señales, Dios otorgaba autoridad a los apóstoles para efectuar con éxito la misión que Él les había encomendado.
Debemos entender que tal confirmación ya no se puede dar en nuestros días. ¿Por qué? Porque la Palabra ya ha sido confirmada, y no es necesario que vuelva a ser confirmada. Esto lo dice muy claro Hebreos 2:3, 4: "la cual (hablando de la Palabra), habiendo sido anunciada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que oyeron, testificando Dios juntamente con ellos, con señales y prodigios y diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad" En este versículo póngase atención la frase "fue confirmada". En el griego encontramos la palabra “ebebaióte”. Este es un término jurídico, usado frecuentemente en el sentido de una garantía legal. El tiempo verbal usado aquí presenta la acción en su totalidad como algo ocurrido en el pasado. Entonces, las señales que fueron efectuadas, incluyendo el "hablar en lenguas", fueron usadas en el pasado para confirmar la Palabra. Y si ya fue confirmada o ratificada, no hay necesidad de ratificarla otra vez (Gálatas 3:15). "Un pacto, aunque sea de hombre, una vez ratificado, nadie lo invalida, ni le añade". La ratificación de un pacto es un acto final que es ratificado una sola vez y con esto basta para siempre. Buscar el "don de hablar en otras lenguas", sería como decir que la palabra de los apóstoles, la que está escrita en el Nuevo Pacto, no está completa y requiere de nuevos esfuerzos para ser ratificada. ¡Pero esto sería absurdo! ya fue confirmada, dice el Espíritu Santo, y si ya fue confirmada, ¡no hay necesidad de "las señales que la seguían" para su confirmación!. Entonces, el "don de hablar en lenguas" ha cesado, ya que su propósito ha sido cumplido.
EL DON DE LENGUAS CESÓ: EVIDENCIA BÍBLICA INTERPRETATIVA.
En la primera epístola a los Corintios, en el capítulo 13, versos 8-10, leemos nuevamente que los "dones milagrosos", entre los que se encuentra el de "hablar en lenguas", han terminado. El texto dice: "el amor nunca deja de ser; pero las profecías se acabarán, y cesarán las lenguas, y la ciencia acabará. Porque en parte conocemos y en parte profetizamos; mas cuando venga lo perfecto, entonces lo que es en parte se acabará” El verbo griego "katargeo" se usa en este pasaje, y significa "hacer ineficaz". Toda ocurrencia de este verbo en los versos 8 y 10 tiene la voz pasiva, indicando que alguna persona (Dios) haría ineficaces (inactivas) las profecías y la ciencia. Por otro lado, el verbo que es empleado en relación con las lenguas es, "pauomai", y este se encuentra en la voz media, indicando que desaparecerían espontáneamente. Como podemos ver, la ciencia, la profecía y las lenguas tendrían su fin a la llegada de "lo perfecto". Pero ¿qué es "lo perfecto? Analicemos primero una teoría a la luz de la Biblia:
- Lo perfecto se refiere a la segunda venida de Cristo.
Esta afirmación no es lógica. No puede referirse a la segunda venida porque el pasaje dice: "cuando venga" y no "cuando regrese". Tampoco puede referirse a Cristo porque la frase esta en género neutro. Dice: "cuando venga lo perfecto". Si se refiriera a Cristo, el texto diría: "cuando venga el perfecto", o simplemente, "cuando regrese Cristo", pero el texto no dice de ninguna de estas maneras. Entonces el texto no habla de la segunda venida de Cristo.
¿Qué es lo perfecto? Esta perfección es la perfección de la madurez, ya que Pablo, en el contexto, habla de ser niño y de llegar a ser hombre; es decir, de la infancia a la madurez. ¿Qué produce en nosotros madurez? La verdad, la Palabra de Dios; es decir, el Nuevo Testamento (Efesios 4:15). "Cuando venga lo perfecto", se refiere al conocimiento perfecto, completo y totalmente desarrollado (1 Cor. 13:12); al conocimiento de la voluntad de Dios. Hoy, y desde el año 100 aproximadamente, se encuentra en el Nuevo Testamento toda la voluntad divina (2 Pedro 1:3; Judas 3; 2 Timoteo 3:16, 17). A esta revelación no podemos quitarle ni añadirle sin caer en un pecado (Gálatas 1:6-10; 2 Juan 7-11; Apocalipsis 22:18, 19). Por designio de Dios tenemos en el Nuevo Testamento "toda la verdad" plenamente revelada a los apóstoles (Juan 16:13) Por tanto, no hay para la existencia de las lenguas y otras señales milagrosas en nuestros días. Eran para obtener "toda la verdad" ya que el Nuevo Testamento no existía en forma escrita. Así que la verdad estaba siendo revelada oralmente por medio de los dones; pero ahora tenemos toda la verdad divinamente inspirada y confirmada mediante las señales que la seguían (Marcos16:17-20; Hebreos 2:3, 4). Si está al alcance "toda la verdad" en el Nuevo Testamento, no sería lógico acudir a Dios y pedirle lo que ahora ya tengo. A base de una decisión hecha por Dios, los dones milagrosos cesaron al cumplirse su propósito primordial de revelar toda la verdad (Juan 16:13). Efesios 4:7-13 y 1 Corintios 13:8-13 juntos, con ciertas deducciones lógicas, fijan la duración de la época de los dones milagrosos, incluyendo el "hablar en lenguas". Efesios 4:13 enseña que los dones fueron "hasta que" (Preposición que expresa el término o fin de una cosa), todos llegaran "a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto". Esto muestra que las enseñanzas del Nuevo Testamento no fueron reveladas todas en un día sino paulatinamente a través de 60 añoso más, desde el 33 después de Cristo, cuando en Pentecostés fue predicado el primer sermón; hasta el 96 después de Cristo, cuando fue terminado de escribir el Apocalipsis. Poco a poco toda la Iglesia llegó a tener “toda la verdad". A fines del primer siglo, todos los creyentes ya tenían la doctrina completa y perfecta del Señor. Teniendo “toda la verdad", llegaron "a la unidad de la fe", y "del conocimiento" de Cristo, "el Hijo de Dios". Los dones duraron “hasta" aquel entonces; es decir, "hasta" los fines del primer siglo, luego, fueron hechos ineficaces o inactivos. Entonces "la fe", o sea, la doctrina completa "había sido una vez dada a los santos" (Judas 3).
El Espíritu Santo no volverá a efectuar de nuevo una obra ya hecha a perfección, completa, no volverá a revelar, mediante los dones, “toda la verdad"; no obrará más por medio de los dones al haber cumplido total y cabalmente la encomienda de Cristo (Juan 16:13). El Espíritu Santo les entregó a los apóstoles "toda la verdad", y lo hizo antes que pasara esa generación. Él ya no obra con dones, sino a través de la Palabra inspirada por él, la cual es "viva y eficaz" (Hebreos 4:12). "lo perfecto", se refiere, no a una persona, sino al conocimiento obtenido mediante los dones de "ciencia y profecía". Al decir, "ciencia", no se trata de ciencias mundanas como la geometría, la biología o la de mandar hombres a la luna, sino que se refiere a la voluntad divina obtenida en aquel tiempo por el don sobrenatural de ciencia (1 Cor. 12:8). En aquellos tiempos, los cristianos, conocían "..en parte..", porque cuando Pablo, por ejemplo, escribió a la Iglesia en Corinto no "..toda la verdad.." se había revelado, todavía el Espíritu Santo trabajaba por medio de los dones para revelar esa verdad totalmente. "..en parte.." profetizaban, poco a poco recibían el conocimiento de la verdad (Ef. 4:13), y también las profecías. Una vez que vino "..lo perfecto.."; es decir, el conocimiento total de la voluntad divina, o sea, el Nuevo Testamento, podemos obtener el "..conocimiento.." que necesitamos para madurar espiritualmente, y así, permanecer firmes en la vida cristiana durante esta vida. "..lo perfecto..", todo el Nuevo Testamento, el Nuevo Pacto hace posible llegar a "..un varón perfecto.."; es decir, a una iglesia madura, completa y totalmente organizada con "..toda la verdad.." (Ef. 4:13, 16). En su niñez (1 Cor.13:11), la iglesia recibió la verdad mediante los dones; al madurar (1 Cor. 13:11), era de esperarse que dejara los dones que la sostenían espiritualmente en su niñez, tal como un padre sostiene a su hijo cuando está aprendiendo a caminar, pero no lo sigue sosteniendo cuando éste ya sabe caminar. Así Dios ya sostuvo a la iglesia con los dones; por medio de ellos la enseñó y la preparó, proveyéndola con "..toda la verdad..", y la ha puesto en marcha mandándole que sea "..columna y valuarte de la verdad.." (1 Tim.3:15). Venido "..lo perfecto..", el Nuevo Testamento totalmente escrito, los dones cesaron. De manera que procurar ahora lo que Dios ha quitado es buscar vanamente lo que no está disponible para nuestros tiempos. "..Lo perfecto.." ha llegado, es decir, el Nuevo Testamento."..Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra éste será bienaventurado en lo que hace.." (Santiago 1:25) Como hemos notado anteriormente, los dones milagrosos, entre los cuales está el "don de hablar en otras lenguas", han cesado; por tanto, la practica Pentecostés y Carismática es fraudulenta por no estar respaldada por la Palabra de Dios.