La teoría de que los conversos al judaísmo son los sionistas de Shlomo Sand ; y que los Árabes de Palestina son descendientes de judíos de nada le sirve a los Palestinos porque ellos mismos y sus revisionistas afirman que los árabes ya estaban en pie ahí antes de que llegara Moisés.
Los lideres Árabes siempre alegan que los 3000 años de conexión entre los judíos e Israel no existe -particularmente Jerusalén- nunca existió o es insignificante comparada con una conexión todavía mas antigua que si existió entre ellos y esta tierra. Arafat en una entrevista decía que El Patriarca Abraham, había sido Iraquí, y que el Templo Judío había existido en Yemen. Que muchos pasajes de la Biblia habían ocurrido en Yemen – una vez exclamo: “Dios es testigo de quei por mi sangre hay mas israelita que en la de Ariel Sharon”. Este tipo de exclamaciones son comunes en este discurso que trata de borrar obliterar cualquier marca Judía en la historia de este lugar. Es una falsedad ideológica que se la inculcan ellos mismos a tal grado que llega a ser realidad para sus generaciones.
Es una limpieza étnica-ideológica. Sin embargo choca en contradicciones: Primero se trata de obliterar o desacreditar la presencia Judía en Judea y Samaria o la tierra de Israel, sembrando dudas pero en todo caso la segunda premisa es que de todas maneras “esta mentira Judía”, seria insignificante porque los Árabes estaban ahí primero –Jerusalén fue construido y habitado por los Cananeos que son los ancestros de los palestinos de hoy día- por tanto: “aquí estábamos primero”. En este alegato ya no cuenta la historia islámica y su conquista, porque “ya nosotros estábamos aquí” antes de que llegara el Islam en el 635 EC, y nos “convirtiéramos musulmanes” y mucho antes de que llegaran los esclavos Hebreos de Egipto enviados por Moisés.
Pero tampoco Jesús se salva de esta “retrospectiva limpieza étnica”
Justamente poco después que Israel entrego la Ciudad de Belén a La Autoridad Palestina (AP) después de los Acuerdos de Oslo, Arafat convoco una concentración en la noche de navidad de 1996, enfrente de la Iglesia de La Natividad, en su discurso declaro: “Este es el lugar de nacimiento de nuestro Mesías, el palestino…Jesús el palestino”. Hubo otras declaraciones: “Jesús nació en mi país, en mi tierra: Belén es una ciudad palestina, Nuestro Señor Jesucristo era Palestino”.
De acuerdo al Evangelio de Mateo: la descripción del nacimiento comienza así: “Ahora Jesús habiendo nacido en Belén de Judea en los días del Rey Herodes…”
La descripción del lugar es Belén de Judea, no de palestina ni Cisjordania solo de Judea. No había una nación “Palestina” durante el tiempo de Jesús; era Judea y sus habitantes eran judíos. Jesús nació de madre Judía en una ciudad Judía 135 años antes de que los Romanos le cambiaran el nombre y 650 años antes que los ordas sarracenas-musulmanas conquistaran toda la Península Arábiga.
Si consultamos con los eruditos de la época Josephus, Tacitus y Dio Cassius, historiadores Romanos quienes vivieron esas épocas y escribieron extensamente sobre los esfuerzos Judíos de liberarse de la conquista romana. La primera revuelta 66-73 y 133-135 CE, ellos no hacen ninguna mención de esa tierra como palestina y sus habitantes palestinos. La antigua palestina nunca existio como entidad nacional y ni siquiera como definición de cultura.
Los lideres Árabes siempre alegan que los 3000 años de conexión entre los judíos e Israel no existe -particularmente Jerusalén- nunca existió o es insignificante comparada con una conexión todavía mas antigua que si existió entre ellos y esta tierra. Arafat en una entrevista decía que El Patriarca Abraham, había sido Iraquí, y que el Templo Judío había existido en Yemen. Que muchos pasajes de la Biblia habían ocurrido en Yemen – una vez exclamo: “Dios es testigo de quei por mi sangre hay mas israelita que en la de Ariel Sharon”. Este tipo de exclamaciones son comunes en este discurso que trata de borrar obliterar cualquier marca Judía en la historia de este lugar. Es una falsedad ideológica que se la inculcan ellos mismos a tal grado que llega a ser realidad para sus generaciones.
Es una limpieza étnica-ideológica. Sin embargo choca en contradicciones: Primero se trata de obliterar o desacreditar la presencia Judía en Judea y Samaria o la tierra de Israel, sembrando dudas pero en todo caso la segunda premisa es que de todas maneras “esta mentira Judía”, seria insignificante porque los Árabes estaban ahí primero –Jerusalén fue construido y habitado por los Cananeos que son los ancestros de los palestinos de hoy día- por tanto: “aquí estábamos primero”. En este alegato ya no cuenta la historia islámica y su conquista, porque “ya nosotros estábamos aquí” antes de que llegara el Islam en el 635 EC, y nos “convirtiéramos musulmanes” y mucho antes de que llegaran los esclavos Hebreos de Egipto enviados por Moisés.
Pero tampoco Jesús se salva de esta “retrospectiva limpieza étnica”
Justamente poco después que Israel entrego la Ciudad de Belén a La Autoridad Palestina (AP) después de los Acuerdos de Oslo, Arafat convoco una concentración en la noche de navidad de 1996, enfrente de la Iglesia de La Natividad, en su discurso declaro: “Este es el lugar de nacimiento de nuestro Mesías, el palestino…Jesús el palestino”. Hubo otras declaraciones: “Jesús nació en mi país, en mi tierra: Belén es una ciudad palestina, Nuestro Señor Jesucristo era Palestino”.
De acuerdo al Evangelio de Mateo: la descripción del nacimiento comienza así: “Ahora Jesús habiendo nacido en Belén de Judea en los días del Rey Herodes…”
La descripción del lugar es Belén de Judea, no de palestina ni Cisjordania solo de Judea. No había una nación “Palestina” durante el tiempo de Jesús; era Judea y sus habitantes eran judíos. Jesús nació de madre Judía en una ciudad Judía 135 años antes de que los Romanos le cambiaran el nombre y 650 años antes que los ordas sarracenas-musulmanas conquistaran toda la Península Arábiga.
Si consultamos con los eruditos de la época Josephus, Tacitus y Dio Cassius, historiadores Romanos quienes vivieron esas épocas y escribieron extensamente sobre los esfuerzos Judíos de liberarse de la conquista romana. La primera revuelta 66-73 y 133-135 CE, ellos no hacen ninguna mención de esa tierra como palestina y sus habitantes palestinos. La antigua palestina nunca existio como entidad nacional y ni siquiera como definición de cultura.
