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Los Lugares Más Raros...

Bueno, una de mis metas personales es coger en cuanto lugar se me ocurra y esté la posibilidad y como veo que por aquí todos somos apuntados a la vara cuando sea y donde sea pues se ocurrió que hiciesemos un listado de los lugares mas raros donde hemos cogido y la historia destras de eso. Yo tengo varios lugares checked pero voy a comenzar con uno y su respectiva historia a ver como nos va:

El Desierto de Sarigua en Panamá

Pues si señores, era por ahí de finales de diciembre de 2009 cuando participé en un encuentro de juventudes en Panamá. 200 personas de 36 países diferentes recorriendo el país durante 2 semanas. Los caminos nos llevaron al Desierto de Sarigua, área protegida por el gobierno panameño. Claramente no estamos ni en Africa ni en el Oriente Próximo, por lo que hay que olvidar esas dunas tan propias de Aladino con las que más de uno (incluyendome) ha fantaseado alguna vez. Sin embargo, el lugar estaba vacilon, muchos nopales y vegetación propia de zonas aridas adornaban la rojiza y pedregosa tierra. Nos dividieron en tres grupos y a caminar se ha dicho.

Tras 45 minutos de andar nos detuvimos en una zona que anteriormente había sido utilizada para extraer cuarzo y cuarcita, ese era el lugar establecido para tomar el refrigerio y tener un poco de tiempo libre (una hora y media para ser precisos). Yo como siempre sentí que en mi vida pasada fui Indiana Jones, me salí de los limites establecidos para visitantes y me adentré un poco más para explorar el ambiente. ¡Oye pero sal de ahi! me gritaron desde atras (aqui comienza a ponerse bueno). Particularmente a mi el hombre panameño no me mueve ni media hormona pero he de admitir que este especimen debía estar cruzado con genes griegos minimo, me he dado la vuelta y he visto un hombre grande como de 1 85 de altura, con un bronceado producto de trabajar tantas horas bajo el sol, ojos verdes, unos labios carnosos, unas piernas y brazos dignos de apolo y un paquete que no dejaba nada a la imaginación. Era uno de los guardaparques quien me advertia que estaba fuera de los limites para visitantes.

Quedé anonadado ante tal especimen de hombre que realmente no pude reaccionar por lo que se vio obligado a acercarse a mi. Seguro notó que no dejaba de verle el paquete o mi cara de lujurioso me delató,el caso fue que cuando llegó al punto donde yo estaba me preguntó de que país era y si sabía que atravesar los limites podía generarme una sustanciosa multa, a lo que le respondí que no, sin dejar de ver el paquete. Me advirtió que debiamos ir a la oficina a levantar actas, como buen tico busqué la forma de sobornar al mae diciendole: ¡Ay no, no ando plata! Y ahora que hacemos?? Ni lento ni peresoso el mae capto el mensaje y vi como cas de inmediato el pene de mae comenzó a crecer cada vez más, al punto en el que era demasiado evidente la intension de ambos. Puedo ver ese paquete? le pregunté y sin darle tiempo a que respondiera le saqué ese pedazo moreno, recto y grueso, no lo resistí y comencé a mamar. La bicha era tan grande que no me cabía completa en la boca, la chupe y la chupe hasta que el mae me levantó, me recostó sobre una piedra, me bajó los pantalones y comenzó a mamarme tan exquisitamente que casi me riego. Cualquiera pensaría que semejante bestia era activa, cuando me va pidiendo que le meta el bate, saqué un condon de mi canguro (hombre preparado vale por dos), el mae me lo puso y se la metió, entró tan facil. El mae se recostó sobre la roca y le di tan rapido y fuerte como nunca l habia dado a nadie, el morbo era demasiado, hasta que el mae no aguanto y se dejó expulsar ese cañon de leche que muy pocas veces he visto. El mae acto seguido me la sacó, me quitó el condon y comenzó a mamarme hasta que me vine deliciosamente en su boca, el mae no desperdició una sola gota. Una vez terminamos, nos vestimos, apretamos un rato y me dijo: por esta vez le perdono la multa pero la próxima va a tener que ir a pagarla a mi casa.

Salimos y cada quien por su lado.

Y esa es la historia de como cogí en un desierto por primera vez. jejeje

A ver que historias tienen ustedes estimados foreros!!
 
#1 en FACTURA ELECTRÓNICA
hace unos dias vi la imagen de una iglesia que tuvo que ser declarada inhabitable, debido a un temblor o algo asi, la misma no ha sido reconstruida y mas bien una persona se encargo de poner una especie de muñecos sentados en la banca con la cara tapada con un trapo o algo asi. No encontre la imagen ahorita, pero tuve la mala suerte de tener una pesadilla con eso....

Eso cuenta como lugar raro..
 
Bueno, una de mis metas personales es coger en cuanto lugar se me ocurra y esté la posibilidad y como veo que por aquí todos somos apuntados a la vara cuando sea y donde sea pues se ocurrió que hiciesemos un listado de los lugares mas raros donde hemos cogido y la historia destras de eso. Yo tengo varios lugares checked pero voy a comenzar con uno y su respectiva historia a ver como nos va:

El Desierto de Sarigua en Panamá

Pues si señores, era por ahí de finales de diciembre de 2009 cuando participé en un encuentro de juventudes en Panamá. 200 personas de 36 países diferentes recorriendo el país durante 2 semanas. Los caminos nos llevaron al Desierto de Sarigua, área protegida por el gobierno panameño. Claramente no estamos ni en Africa ni en el Oriente Próximo, por lo que hay que olvidar esas dunas tan propias de Aladino con las que más de uno (incluyendome) ha fantaseado alguna vez. Sin embargo, el lugar estaba vacilon, muchos nopales y vegetación propia de zonas aridas adornaban la rojiza y pedregosa tierra. Nos dividieron en tres grupos y a caminar se ha dicho.

Salimos y cada quien por su lado.

Y esa es la historia de como cogí en un desierto por primera vez. jejeje

A ver que historias tienen ustedes estimados foreros!!

Mae WOWWWWWWWWWWWWWWWWW que rico.... andamos en lo mismo... buscando esos lugares.. es delicioso...
tu historia esta demasiado rica... pude imaginarme cada escena hasta que me pare...
 
¡QUE BRUTO ALBERIO! Amé la redacción.
Está buenísimo el tema, y el relato muchísimo más. Aunque no tenga ninguna historia tan interesante, voy a pensar en algunos lugares y luego los comento. Yo igual voy por ahí: morboso y con demasiada imaginación.
8)
 
El Sexo También Es Arte

¡Pura Vida Mae Publico y Shamrock!

Pues bien, con el afán de continuar con este tema de lugares raros, y así darles tiempo de recordar sus propias experiencias sin que el tema caiga en el olvido, voy con mi segundo relato.

La Otra Cara del Teatro Nacional

No recuerdo muy bien la época, pero tomando en cuenta el mae con quien tuve esta experiencia, debió ser por ahí de noviembre de 2008 (Juventud divino tesoro...).

Corría mi primer año de universidad cuando en un curso de historia del arte y la cultura nos asignaron un proyecto X, ahí fue donde lo conocí: Alto, moreno, de dientes perfectos, un cuerpo apenas marcado y con el vello apenas necesario. Para efectos de este relato lo llamaremos Borja, dada su ascendencia ibérica (yo y mi crush con los españoles). El mae era más tico que el gallo pinto, resultaba que su abuelo paterno o algo así era español, pero supongo que no es importante para el tema que nos ocupa.

Con el pasar del cuatrimestre nos hicimos buenos amigos, conocí a sus padres, parte de su familia, algunos de sus amigos y a su muy guapa y hermosa novia (que les diré al pan, pan y al vino, vino estaba guapa la chica esa). En aquella entonces, si bien estaba muy consciente de mi identidad sexual, no era algo con lo que me sintiera muy cómodo, mucho menos para que la gente supiera, ya saben siempre hay preguntas incomodas (a hoy día todo superado).

Un día a fin de curso, salimos de un examen colegiado y nos sentamos a conversar, yo me encendí un cigarrillo y el, como no fumaba, me veía... No recuerdo muy bien en que momento ocurrió pero en nuestra conversación se sentía una fuerte tensión sexual. El mae cada vez hacía preguntas más descaradas y yo sin saber muy bien que responder (el mae además de tener novia ERA super religioso), al final y como yo tenía que hacer un experimento de campo le pregunté si no quería ser mi "turista" en una investigación que tenía que presentar de un city tour que había montado unas semanas atrás. Borja acepto y nos pusimos a andar.

Llegamos al Teatro Nacional y mientras explicaba su historia y características en la fachada, Borja me preguntó si podíamos hacer una pausa y conocer por dentro el Teatro, ya que nunca había entrado. Yo, como el turistólogo en formación de aquella entonces, sabía que los ticos tenemos libre acceso al Teatro Nacional cuando no hay funciones para que podamos conocer en detalle todo su arte y su historia, así que le pedí la cédula y nos fui a registrar con el guarda.

Una vez adentro comenzamos a caminar y a explorar, le contaba sobre la historia de los frescos, de las diferentes galerías y del teatro que en si mismo es una obra de arte. Ese día en particular no había nadie visitando las instalaciones. Durante nuestro recorrido exploratorio Borja me preguntó dónde estaba el baño, así que lo llevé a uno cercano a donde estábamos.

El mae se ubicó en el último orinal y yo en el de la par, no tenían divisiones y seguimos conversando. En algún momento le volvía ver el pene y tenía una enorme erección a lo que en tono gracioso le dije "Diay, papi. Le pareció excitante el teatro?" el mae se puso rojo y comenzó a decirme que sorry, que no sabía porque le pasó y blah blah blah yo lo único que le dije fue que tranquilo que no le iba a decir a nadie. No me esperé que el mae me dijera "Ah bueno, en ese caso..." Se hincara y comenzara a mamarme, yo no estaba erecto pero se podrán imaginar que fue cuestión de segundos. mamaba delicioso, pero aun así no pude dejar de preguntarle que qué le pasaba, que él tenía novia. Me contestó que necesitaba saber si sus impulsos conmigo eran parte de él o si era pura curiosidad. Yo le pregunté si seguiríamos siendo amigos sin importar lo que pasara ahí (ojo el seguía de rodillas), el me dijo que sí. Acto seguido, lo puse de pie, me lo apreté y le dije que me esperara un toque. Fui me asomé al pasillo y me devolví a decirle que conocía un lugar más privado en el teatro (en algún momento hice un voluntariado ahí y conocía ciertos vicios que tenían, entre ellos no cerrar los palcos cuando no había funciones). Así que nos metimos en un palco, comenzamos a besarnos, le quité la camisa y el a mi. Nos besamos cada parte del cuerpo. En cuestión de minutos quedamos desnudos. Me sentó en una butaca y comenzó a mamarme deliciosamente. Lo lancé contra la pared, me hinqué y comencé a mamar. Al cabo de unos minutos, le pregunté: "quiere picha?" a lo que me respondió que era todo o nada. Saqué un condón, le chupé el culo y se la dejé ir. ¡Nada como ser la primera verga en un culo virgen! Delicioso, el mae estaba quejándose mucho y me asustaba que nos escucharan así que tuve que taparle la boca mientras me lo cogía. Me acosté en el suelo y el se sentó en mi pene, me lo cogí como nunca hasta que el mae se regó en mi pecho, casi inmediatamente yo me regué en el condón. Necesitábamos limpiarnos, especialmente yo que quedé con todo el pecho lleno de semen. Aun con algo se excitación en la sangre, recogimos la ropa y salimos desnudos camino al baño, nadie nos vio. Nos limpiamos, apretamos un poco más, el mae me la mamo un poco más, nos vestimos y nos fuimos.

Al dia siguiente me saqué un 100 en mi proyecto de campo. Valió la pena tanto sacrificio jeje

Así que si algún día van a los palcos del Teatro Nacional sepan que puede que ahí este gran parte de mi libido y mi sudor, por si les llega un olor a sexo, fui yo jejeje
 
¡Pura Vida Mae Publico y Shamrock!

Pues bien, con el afán de continuar con este tema de lugares raros, y así darles tiempo de recordar sus propias experiencias sin que el tema caiga en el olvido, voy con mi segundo relato.

La Otra Cara del Teatro Nacional

No recuerdo muy bien la época, pero tomando en cuenta el mae con quien tuve esta experiencia, debió ser por ahí de noviembre de 2008 (Juventud divino tesoro...).

Corría mi primer año de universidad cuando en un curso de historia del arte y la cultura nos asignaron un proyecto X, ahí fue donde lo conocí: Alto, moreno, de dientes perfectos, un cuerpo apenas marcado y con el vello apenas necesario. Para efectos de este relato lo llamaremos Borja, dada su ascendencia ibérica (yo y mi crush con los españoles). El mae era más tico que el gallo pinto, resultaba que su abuelo paterno o algo así era español, pero supongo que no es importante para el tema que nos ocupa.

Con el pasar del cuatrimestre nos hicimos buenos amigos, conocí a sus padres, parte de su familia, algunos de sus amigos y a su muy guapa y hermosa novia (que les diré al pan, pan y al vino, vino estaba guapa la chica esa). En aquella entonces, si bien estaba muy consciente de mi identidad sexual, no era algo con lo que me sintiera muy cómodo, mucho menos para que la gente supiera, ya saben siempre hay preguntas incomodas (a hoy día todo superado).

Un día a fin de curso, salimos de un examen colegiado y nos sentamos a conversar, yo me encendí un cigarrillo y el, como no fumaba, me veía... No recuerdo muy bien en que momento ocurrió pero en nuestra conversación se sentía una fuerte tensión sexual. El mae cada vez hacía preguntas más descaradas y yo sin saber muy bien que responder (el mae además de tener novia ERA super religioso), al final y como yo tenía que hacer un experimento de campo le pregunté si no quería ser mi "turista" en una investigación que tenía que presentar de un city tour que había montado unas semanas atrás. Borja acepto y nos pusimos a andar.

Llegamos al Teatro Nacional y mientras explicaba su historia y características en la fachada, Borja me preguntó si podíamos hacer una pausa y conocer por dentro el Teatro, ya que nunca había entrado. Yo, como el turistólogo en formación de aquella entonces, sabía que los ticos tenemos libre acceso al Teatro Nacional cuando no hay funciones para que podamos conocer en detalle todo su arte y su historia, así que le pedí la cédula y nos fui a registrar con el guarda.

Una vez adentro comenzamos a caminar y a explorar, le contaba sobre la historia de los frescos, de las diferentes galerías y del teatro que en si mismo es una obra de arte. Ese día en particular no había nadie visitando las instalaciones. Durante nuestro recorrido exploratorio Borja me preguntó dónde estaba el baño, así que lo llevé a uno cercano a donde estábamos.

El mae se ubicó en el último orinal y yo en el de la par, no tenían divisiones y seguimos conversando. En algún momento le volvía ver el pene y tenía una enorme erección a lo que en tono gracioso le dije "Diay, papi. Le pareció excitante el teatro?" el mae se puso rojo y comenzó a decirme que sorry, que no sabía porque le pasó y blah blah blah yo lo único que le dije fue que tranquilo que no le iba a decir a nadie. No me esperé que el mae me dijera "Ah bueno, en ese caso..." Se hincara y comenzara a mamarme, yo no estaba erecto pero se podrán imaginar que fue cuestión de segundos. mamaba delicioso, pero aun así no pude dejar de preguntarle que qué le pasaba, que él tenía novia. Me contestó que necesitaba saber si sus impulsos conmigo eran parte de él o si era pura curiosidad. Yo le pregunté si seguiríamos siendo amigos sin importar lo que pasara ahí (ojo el seguía de rodillas), el me dijo que sí. Acto seguido, lo puse de pie, me lo apreté y le dije que me esperara un toque. Fui me asomé al pasillo y me devolví a decirle que conocía un lugar más privado en el teatro (en algún momento hice un voluntariado ahí y conocía ciertos vicios que tenían, entre ellos no cerrar los palcos cuando no había funciones). Así que nos metimos en un palco, comenzamos a besarnos, le quité la camisa y el a mi. Nos besamos cada parte del cuerpo. En cuestión de minutos quedamos desnudos. Me sentó en una butaca y comenzó a mamarme deliciosamente. Lo lancé contra la pared, me hinqué y comencé a mamar. Al cabo de unos minutos, le pregunté: "quiere picha?" a lo que me respondió que era todo o nada. Saqué un condón, le chupé el culo y se la dejé ir. ¡Nada como ser la primera verga en un culo virgen! Delicioso, el mae estaba quejándose mucho y me asustaba que nos escucharan así que tuve que taparle la boca mientras me lo cogía. Me acosté en el suelo y el se sentó en mi pene, me lo cogí como nunca hasta que el mae se regó en mi pecho, casi inmediatamente yo me regué en el condón. Necesitábamos limpiarnos, especialmente yo que quedé con todo el pecho lleno de semen. Aun con algo se excitación en la sangre, recogimos la ropa y salimos desnudos camino al baño, nadie nos vio. Nos limpiamos, apretamos un poco más, el mae me la mamo un poco más, nos vestimos y nos fuimos.

Al dia siguiente me saqué un 100 en mi proyecto de campo. Valió la pena tanto sacrificio jeje

Así que si algún día van a los palcos del Teatro Nacional sepan que puede que ahí este gran parte de mi libido y mi sudor, por si les llega un olor a sexo, fui yo jejeje

Es lo más hermoso que he leído en este foro... aunque claro estoy un poco shockeado, que hayan profanado mi hermoso teatro :'( pero debe haber valido la pena!! Jaja
 
Mae soy demasiado primerizo por el momento para tener historias asi pero que EXITO de relatos . Fan #1 de este tema :fijo:
 
En Guerra Avisada, No Muere Soldado.

Bueno como hace tiempo no les comparto una de mis anécdotas decidí que hoy era el día de volver a contactar a mis queridos foreros, así que aquí voy.

EN GUERRA AVISADA, NO MUERE SOLDADO

Yo siempre he sido un mae muy emprendedor, inclusive en mis peores momentos nunca me resigné a escuchar esas voces que decían "no lo lograrás". Quería viajar, no tenía un trabajo estable y la política en mi familia era que el primer viaje corría por cuenta de uno, así que ahí estaba yo sin plata y con unas ganas de conocer Europa que no me las aguantaba. Como caído del cielo, llegó a mis manos la información para la convocatoria a una beca que reunía 350 jóvenes de 65 países y los llevaban a una expedición de mediana duración a través del continente Americano y Europeo. Mi gran oportunidad.

Trabajé como loco durante tres meses para tener lista, a tiempo, mi propuesta literaria para concursar por una de las tres plazas para Costa Rica, defendí mi proyecto y gané el primer lugar, un sueño a punto de volverse realidad: para la edición de mi año correspondía visitar México, Estados Unidos y España.

Europa resultó ser todo lo que yo esperaba y más: El Museo del Prado, el Real Jardín Botánico de Madrid, el Palacio del Pardo, El Guggenheim, Los Molinos del Quijote y mucho más, resultaron ser todo lo que yo soñaba con conocer algún día; pero hubo un lugar que jamás podrá salir de mi memoria: La Real Academia y Base de Infantería de Toledo, Castilla-La Mancha. Dado que el estilo de la beca era en formato aventura, no dormíamos en hoteles, sino que acampábamos u ocupábamos gimnasios y lugres por el estilo, es este caso el ejercito español fue muy amable de dejarnos su Base de Infantería con algunos camarotes libres por unos cuantos días.

No lo olvido, era un sábado, un sábado como cualquier otro y un tiempo libre de 18 horas para hacer lo que quisiéramos. Tras haber conocido la ciudad, el casco antiguo de Toledo y con unas cuantas espadas y dagas forjadas a mano en mi poder (las cuales inevitablemente serían perdidas en el aeropuerto de regreso a casa por un descuido de este servidor), decidí que era tiempo de un descanso. Le dije a mi amigo de Irlanda, Patrick para efectos de este relato, que si me quería acompañar y regresamos a la base.

Llegamos, y nuestra sorpresa fue que no había nadie en nuestro pabellón. Fuimos a ducharnos y ahí comenzó todo. Europa, en su falta de pudor y excesos de confianza, no considera prudente que las duchas tengan divisiones. Será muy sencillo ver a 10 maes duchándose juntos en una sola unidad de duchas al mismo tiempo, como buen europeo y como buen irlandés Patrick no era la excepción a esta regla.

Llegamos a los lockers y comenzamos a desvestirnos, siempre que lo veía desnudo pensaba en todo lo que daría por que esos brazos grandes y fuertes me tomarán entre ellos, en poder morder su velludo pecho (era casi un oso, con todo el cuerpo lleno de vellos rojizos). Pensaba en el morbo que daría el poder ponerme sobre su blanco cuerpo, el besar sus rojos labios, el hacerlo mio, aunque a la mañana siguiente siguiesemos siendo tan amigos como el día anterior. Solo sería una vez, era todo lo que necesitaba.

Entramos a las duchas, y en cuestión de segundos el vapor dejó la unidad con poca visibilidad. Lo observaba a través de la blanca cortina de vapor. Observaba como se limpiaba la espalda, esa espalda fuerte y ancha. Esas piernas ¿que podía esperar de un jugador juvenil de rugby (deporte que aprendió durante uno de sus viajes a Inglaterra)? Ese trasero... ¡Uff! Me dejaba sin aliento.

Simplemente fue inevitable, tuve una erección mientras lo veía descaradamente. Al cabo de un rato, notó que mi "amigo fiel" había despertado, a lo que me dijo en su perfecto castellano "te ha puesto cachondo el agua caliente". No pude más que mirar fijamente esos ojos verdes y responderle "No ha sido el agua caliente, has sido tú".

Un silencio bastante incómodo inundó la habitación mientras el único ruido que se percibía provenía del agua que corría de las duchas "¿Aquí?", me preguntó. No respondí, me acerqué y comencé a limpiar esa piel con mis manos, sentir cada rincón de su cuerpo, besar su cuello. Me tomó fuertemente y comenzó a besarme contra la pared de las duchas, la temperatura subía cada vez más. Me preguntó si quería ir a su camarote, claro que accedí.

Los camarotes seguían vacíos, claro cualquier persona normal estaría aprovechando el poco tiempo libre que teníamos para conocer la ciudad medieval, pero yo solo quería saborear el pene de Patrick, sentir como el chupaba el mío, lamer ese trasero, disfrutar de las nalgadas que me daba. Necesitábamos condones (pequeño safis), pero sabíamos que estábamos en una base militar y que por ende debería de haber condones escondidos por ahí de los soldados ¡Eureka! Tras la puerta de un pequeño armario de metal había una caja con tres condones. Me pidió que lo penetrara, me puso el condón y nos acostamos en la parte baja del camarote, me coloqué tras de él de medio lado y suavemente lo comencé a penetrar. Primero suave, muy suave. Luego cada vez más fuerte. Sudábamos como nunca, Patrick y yo gemíamos de placer. Estábamos solos, así que no nos preocupaba hacer ruido, aunque siempre estaba el miedo presente de que algún monitor llegara o peor aún un sargento: las leyes militares no excluyen a nadie, inclusive sin ser cadetes estábamos en territorio militar. Un universo paralelo.

Me pedía más y le daba más, nos levantamos y se puso de cuatro sobre el camarote, lo penetré. Le daba lo más rápido que podía hasta que ni él ni yo pudimos más: eyaculamos al mismo tiempo. Caí rendido sobre su espalda, esa espalda grande, fuerte y blanca. Lo besé y descansamos un rato hasta que perdí la erección y mi pene salió naturalmente de su ano. Me abrazó y me pidió que no permitiéramos que eso arruinará la amistad, le prometí que no sería así.

Al día siguiente Patrick fue expulsado de la expedición por romper una regla básica de la beca. Años después vino de visita a Costa Rica y seguíamos siendo tan unidos como aquel día, aunque nunca más lo volvimos a hacer.
 
Uy bb si les contará todos los lugares raros no me alcanzaría la noche.... Pffffffff... Para empezar enfrente de la iglesia de Guadalupe en un carro a plena luz del día.... Espectacular en la ruta 27... En la piscina del colegio de contadores... En el suelo de la cocina de mi suegra cuando ella estaba en el baño jajaja en un árbol a la par de la calle... En un puente peatonal.... Uy me encantan esas cosas locas
 
Bueno como hace tiempo no les comparto una de mis anécdotas decidí que hoy era el día de volver a contactar a mis queridos foreros, así que aquí voy.

EN GUERRA AVISADA, NO MUERE SOLDADO

Yo siempre he sido un mae muy emprendedor, inclusive en mis peores momentos nunca me resigné a escuchar esas voces que decían "no lo lograrás". Quería viajar, no tenía un trabajo estable y la política en mi familia era que el primer viaje corría por cuenta de uno, así que ahí estaba yo sin plata y con unas ganas de conocer Europa que no me las aguantaba. Como caído del cielo, llegó a mis manos la información para la convocatoria a una beca que reunía 350 jóvenes de 65 países y los llevaban a una expedición de mediana duración a través del continente Americano y Europeo. Mi gran oportunidad.

Trabajé como loco durante tres meses para tener lista, a tiempo, mi propuesta literaria para concursar por una de las tres plazas para Costa Rica, defendí mi proyecto y gané el primer lugar, un sueño a punto de volverse realidad: para la edición de mi año correspondía visitar México, Estados Unidos y España.

Europa resultó ser todo lo que yo esperaba y más: El Museo del Prado, el Real Jardín Botánico de Madrid, el Palacio del Pardo, El Guggenheim, Los Molinos del Quijote y mucho más, resultaron ser todo lo que yo soñaba con conocer algún día; pero hubo un lugar que jamás podrá salir de mi memoria: La Real Academia y Base de Infantería de Toledo, Castilla-La Mancha. Dado que el estilo de la beca era en formato aventura, no dormíamos en hoteles, sino que acampábamos u ocupábamos gimnasios y lugres por el estilo, es este caso el ejercito español fue muy amable de dejarnos su Base de Infantería con algunos camarotes libres por unos cuantos días.

No lo olvido, era un sábado, un sábado como cualquier otro y un tiempo libre de 18 horas para hacer lo que quisiéramos. Tras haber conocido la ciudad, el casco antiguo de Toledo y con unas cuantas espadas y dagas forjadas a mano en mi poder (las cuales inevitablemente serían perdidas en el aeropuerto de regreso a casa por un descuido de este servidor), decidí que era tiempo de un descanso. Le dije a mi amigo de Irlanda, Patrick para efectos de este relato, que si me quería acompañar y regresamos a la base.

Llegamos, y nuestra sorpresa fue que no había nadie en nuestro pabellón. Fuimos a ducharnos y ahí comenzó todo. Europa, en su falta de pudor y excesos de confianza, no considera prudente que las duchas tengan divisiones. Será muy sencillo ver a 10 maes duchándose juntos en una sola unidad de duchas al mismo tiempo, como buen europeo y como buen irlandés Patrick no era la excepción a esta regla.

Llegamos a los lockers y comenzamos a desvestirnos, siempre que lo veía desnudo pensaba en todo lo que daría por que esos brazos grandes y fuertes me tomarán entre ellos, en poder morder su velludo pecho (era casi un oso, con todo el cuerpo lleno de vellos rojizos). Pensaba en el morbo que daría el poder ponerme sobre su blanco cuerpo, el besar sus rojos labios, el hacerlo mio, aunque a la mañana siguiente siguiesemos siendo tan amigos como el día anterior. Solo sería una vez, era todo lo que necesitaba.

Entramos a las duchas, y en cuestión de segundos el vapor dejó la unidad con poca visibilidad. Lo observaba a través de la blanca cortina de vapor. Observaba como se limpiaba la espalda, esa espalda fuerte y ancha. Esas piernas ¿que podía esperar de un jugador juvenil de rugby (deporte que aprendió durante uno de sus viajes a Inglaterra)? Ese trasero... ¡Uff! Me dejaba sin aliento.

Simplemente fue inevitable, tuve una erección mientras lo veía descaradamente. Al cabo de un rato, notó que mi "amigo fiel" había despertado, a lo que me dijo en su perfecto castellano "te ha puesto cachondo el agua caliente". No pude más que mirar fijamente esos ojos verdes y responderle "No ha sido el agua caliente, has sido tú".

Un silencio bastante incómodo inundó la habitación mientras el único ruido que se percibía provenía del agua que corría de las duchas "¿Aquí?", me preguntó. No respondí, me acerqué y comencé a limpiar esa piel con mis manos, sentir cada rincón de su cuerpo, besar su cuello. Me tomó fuertemente y comenzó a besarme contra la pared de las duchas, la temperatura subía cada vez más. Me preguntó si quería ir a su camarote, claro que accedí.

Los camarotes seguían vacíos, claro cualquier persona normal estaría aprovechando el poco tiempo libre que teníamos para conocer la ciudad medieval, pero yo solo quería saborear el pene de Patrick, sentir como el chupaba el mío, lamer ese trasero, disfrutar de las nalgadas que me daba. Necesitábamos condones (pequeño safis), pero sabíamos que estábamos en una base militar y que por ende debería de haber condones escondidos por ahí de los soldados ¡Eureka! Tras la puerta de un pequeño armario de metal había una caja con tres condones. Me pidió que lo penetrara, me puso el condón y nos acostamos en la parte baja del camarote, me coloqué tras de él de medio lado y suavemente lo comencé a penetrar. Primero suave, muy suave. Luego cada vez más fuerte. Sudábamos como nunca, Patrick y yo gemíamos de placer. Estábamos solos, así que no nos preocupaba hacer ruido, aunque siempre estaba el miedo presente de que algún monitor llegara o peor aún un sargento: las leyes militares no excluyen a nadie, inclusive sin ser cadetes estábamos en territorio militar. Un universo paralelo.

Me pedía más y le daba más, nos levantamos y se puso de cuatro sobre el camarote, lo penetré. Le daba lo más rápido que podía hasta que ni él ni yo pudimos más: eyaculamos al mismo tiempo. Caí rendido sobre su espalda, esa espalda grande, fuerte y blanca. Lo besé y descansamos un rato hasta que perdí la erección y mi pene salió naturalmente de su ano. Me abrazó y me pidió que no permitiéramos que eso arruinará la amistad, le prometí que no sería así.

Al día siguiente Patrick fue expulsado de la expedición por romper una regla básica de la beca. Años después vino de visita a Costa Rica y seguíamos siendo tan unidos como aquel día, aunque nunca más lo volvimos a hacer.

y todo eso para contar que anduviste en Europa
 

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