Ya más en tema de fondo, como dice Oreg Lycan, se percibe claramente una polarización en la sociedad a nivel de hábitos de salud, por un lado la gente pobre tiende a comer muy mal, y son los que presentan más casos de obesidad. Comer mal sale más barato. Vea en las barriadas pobres, la proliferación de negocios tipo tacos/pollo frito de bombillo en las esquinas y las paradas de buses. En cambio, comer bien, hacer ejercicio, etc. eso ud lo ve más en la clase media para arriba.
Lo vacilón es que la información para tener buenos hábitos está al alcance de la mano. Ya todo mundo tiene smartphone, sean pobres o ricos. O sea, todo se reduce a un asunto de educación.