benjurion
ANÓNIMO
Yo tengo muchos años de trabajar en Tamarindo y he ido ahí muchas veces. Hace poco fui con mi novia a cenar ahí. Entramos, nadie nos recibió en la entrada, el local estaba tal vez a un 50% de su capacidad, duramos quizás unos 2 minutos de pie en el centro del restaurante escogiendo una mesa, luego de ir a sentarnos, pasaron 15 minutos para que yo me levantara a solicitar que nos atendieran, ya que vimos varios saloneros/as yendo y viniendo limpiando mesas. Pues la tipa con la que me topé (resultó ser administradora del local o al menos jefe de saloneros) tuvo una actitud despreciativa y desagradable: cuando le pedí que por favor nos atendieran, puso cara de loca y extrañeza, por lo que le dije que llevábamos 15 minutos esperando que nos atendieran, ella empezó a buscar la mesa donde estábamos con la mirada tratando de indicarme que ni nos veíamos o que acabábamos de llegar, le indiqué que el restaurante no estaba lleno como para atrasarse tanto en la atención pero ella me contestó que nos nos habíamos presentado al llegar, le dije que con quién si no tenían un hostess, hasta duramos bastante tiempo de pie tratando de escoger mesa. Pero lo que me hizo explotar fue cuando dijo que si no veía que ellos estaban ocupados, entonces yo, con tono fuerte por mi enojo le indiqué que nosotros no habíamos llegado a pedir que nos regalaran comida, pero que si era que no querían mi dinero con mucho gusto iba a ir a gastarlo a otro lado donde me atendieran, que yo soy local y que somos los locales los que le sostenemos el negocio durante la temporada baja y me fui. La mujer esta es italiana, super odiosa. La pizza es riquísima, pero el servicio de esta tipa es despreciable. Creo que aún sigue allí.
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